15 Sep Cómo declarar y gestionar ingresos online
Tiempo de lectura: 4 minutosEn pleno año 2022, y tras haber vivido unos duros años marcados directamente por la pandemia de la Covid-19, es sabido por muchos, especialmente, por aquellas personas que tienen a Internet como un elemento importante de su trabajo, que éste se va antojar como imprescindible en la mayoría de desempeños profesionales en el futuro… y también en el presente.
De hecho, muchos trabajadores ya aprovechan las infinitas posibilidades que ofrece la red para trabajar en remoto con sus empresas, o, directamente, trabajar por cuenta propia (lo que comúnmente se conoce como freelance), ya que pueden ponerse en contacto y llegar a colaborar con una cantidad inmensa de profesionales a lo largo y ancho de todo el mundo, incluso, cuando no coincidan en un huso horario similar. Normalmente, además, también existe un buen puñado de personas que, además de los ingresos que perciben por trabajar para una empresa, deciden colaborar profesionalmente con otros para poder sumar un extra mensual.
Pero estas grandes facilidades también llevan consigo otras tantas obligaciones, como es la responsabilidad de establecer una verdadera relación profesional que merezca la pena o cumplir con nuestras obligaciones fiscales, entre otros. Y es precisamente esta segunda variable la que vamos a analizar en este artículo, pues existe un número importante de dudas acerca de cual es la fiscalidad y las obligaciones impositivas de las personas que trabajan como autónomos, prestando servicios a otros, teniendo a Internet como principal eje vertebrador de la comunicación entre ambas partes.
¿Quiénes están obligados a declarar ingresos percibidos por Internet?
La norma general establece que aquellas personas que reciban un total de 22.000 euros brutos al año no están obligados a presentar declaración, pero ojo, siempre y cuando sea de un único pagador, cuestión que en el caso de los profesionales por cuenta propia o las personas que hacen pequeñas colaboraciones no suele ser habitual, por lo que es importante que atendamos también a otras variables. En este sentido, la Agencia Tributaria de nuestro país declara lo siguiente: “No tendrán que presentar declaración en ningún caso quienes obtengan rendimientos íntegros del trabajo, de capital o de actividades económicas, (…) que conjuntamente no superen los 1.000 euros”.
Esto quiere decir que, si los servicios o productos con los que se trabaja en Internet se consideran una actividad económica, habrá que declararlos en cualquier caso, si superan los 1000 euros.
Llegados a este punto, conviene señalar entonces que la Agencia Tributaria considera una actividad económica “los rendimientos de una actividad económica son aquellos que, procediendo del trabajo personal y del capital conjuntamente, o de uno solo de estos factores, supongan por parte del contribuyente la ordenación por cuenta propia de medios de producción y de recursos humanos o de uno de ambos, con la finalidad de intervenir en la producción o distribución de bienes o servicios.”
Dicho de otra manera, el comercio electrónico y/o la prestación de un servicio profesional son considerados una actividad económica si percibimos una cuantía determinada por su desempeño. De esta manera, sus rendimientos serán considerados hecho impositivo: sujeto a impuestos.
¿Es obligatorio darse de alta en la Seguridad Social al trabajar por Internet?
Al tratarse de una actividad económica habitual, que tiene, al menos, una cierta recurrencia en el tiempo, es obligatorio darse de alta en la Seguridad Social y, además, en los casos que estamos mencionando (freelances/autónomos) también será obligatorio inscribirse en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
¡Pero, ojo! Existe una excepción bastante importante, que es de relevancia si estás comenzado tu andadura en solitario: en el caso de los comercios online, la ley señala en la actualidad que no es necesario darse de alta como autónomo hasta que los ingresos mensuales del comercio superen el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), cifrado en el año 2021 en 950 euros.
De cualquier modo, por todos es sabido que Hacienda siempre está al tanto de la cuestión y, si te encuentras en esta situación, quizás te tengas que enfrentar a una inspección.
Cuestiones a tener en cuenta cuando ganamos dinero por Internet
Además, existe una serie de otras cuestiones que también debemos tener en consideración si una parte o toda nuestra actividad profesional se desarrolla a través de la red:
- La legislación siempre hará referencia a los “rendimientos”. Es decir, aunque tu comercio electrónico mueva una cantidad enorme de dinero, solo estarás obligado a declararlo si la cantidad del beneficio neto supera los 1000 euros (tras haberle restado todos los gastos derivados de la acción de tu empresa).
- ¡Atención! Es importante que sepas que debes tener en cuenta únicamente estos ingresos si además percibes otros de otras fuentes. Si además de tu actividad en la red tienes más ingresos, también deberás tenerlos en cuenta en tu declaración.
- Y… ¡tranquilidad! Estar obligado a declarar no siempre significa estar obligado a pagar. Aunque se pague por superar los 1000€ anuales, es posible que se devuelvan todas o parte de las cantidades cuando se regularicen (anualmente) con la declaración de la renta.
- Como cualquier actividad económica profesional en España, los bienes o servicios que se comercialicen, derivados de nuestra actividad profesional, siempre estarán sujetos a IVA, salvo que sean esporádicos o estén exentos de IVA de manera expresa por la ley.
Ejemplos de negocios online
Aquí van algunos de los más frecuentes:
- Apuestas deportivas (aprende cómo declarar apuestas deportivas).
- Criptomonedas (aprende cómo declarar las criptomonedas)
- Blogs con publicidad
- Tiendas online y dropshipping
- Loterías y casino
- Póker online
¿No sabes hasta cuánto puedes vender en Internet?. En este artículo te lo contamos.
La mejor solución: una gestoría para centralizar toda tu actividad
Siendo conscientes de este elevado número de posibilidades, estarás obligado a prestar una atención absoluta a tu negocio, que no siempre va a ser sencilla.
Sin embargo, hoy en día, existe una alta cantidad de gestorías online que pueden llevar a cabo una gestión integral de todos tus ingresos, facturas y declaraciones. Con independencia de si tu actividad es únicamente por cuenta propia o mixta, sabrán aconsejarte con seguridad para que tengas claras cuáles son tus mejores opciones, y así estar a bien con la Seguridad Social y Agencia Tributaria, para evitarnos disgustos innecesarios.
En muchos casos, la propia actividad profesional nos obliga a prestar una atención plena a nuestras labores, y no disponemos del tiempo y la energía suficientes para atender a nuestras obligaciones como contribuyentes, por lo que una gestoría es el aliado perfecto para tener un adecuado desarrollo laboral.