17 Dic ¿Qué es la previsión de tesorería y cómo hacerla?
Tiempo de lectura: 4 minutosCualquier persona que trabaje por cuenta propia, sea un autónomo o un gran empresario, ha de tener siempre presente que la tesorería es uno de los cimientos fundamentales para que cualquier tipo de corporación, ya se trate de una PYME o una gran multinacional, pueda funcionar correctamente.
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Manejar la tesorería de tu empresa con acierto y previsión te permitirá anticiparte a los posibles problemas (problemas legales más comunes para las empresas) que puedan aparecer y decidirte por las opciones financieras con mayor seguridad y acierto, al disponer de un colchón económico sobre el que cimentar los pasos de tu compañía.
Dentro del concepto de tesorería, tiene especial importancia el de “previsión de tesorería”, una materia fundamental para que el crecimiento de cualquier tipo de corporación pueda desarrollarse con arreglo y acierto. Pero, ¿Qué es exactamente este término?
¿Qué es la previsión de tesorería?
La previsión de tesorería consiste en una estimación de las entradas y salidas de dinero que va a tener una empresa durante un periodo concreto de tiempo. Este periodo de tiempo es variable, aunque normalmente suelen realizarse estimaciones de carácter mensual, trimestral y anual. También conocida como ‘flujos de caja’ o previsión de Clash Flow, si utilizamos conceptos anglosajones, es una información tremendamente útil para tomar decisiones correctas en el corto, medio y largo plazo.
Como decimos, sea tu presupuesto de 10.000 euros anuales o de millones, es una tarea vital para que tu negocio pueda prosperar con seguridad; pero, cuidado, es muy importante que las previsiones que se realicen sean realistas, es decir, de nada vale realizar una previsión de tesorería incluso semanal, si proyectamos la entrada de un cliente por millones de euros, cuando normalmente hablamos de cifras mucho menores.
Por ello, lo recomendable siempre será realizar previsiones que se ajusten al histórico de nuestro negocio, tanto genérico, como concreto durante el desarrollo del año, ya que, si por ejemplo, nuestra compañía tiene un especial carácter estacional, no obtendremos las mismas ganancias en invierno que en verano.
¿Cómo debe hacerse una previsión de tesorería?
4 Puntos fundamentales a tener en cuenta:
1. Atiende a toda la información disponible
Antes de realizar cualquier tipo de estimación, como comentábamos, debemos hacernos con toda la información previa disponible, para poder realizar un estudio lo más realista posible. Esta información ha de estar relacionada directamente con los pagos y cobros que vayamos a tener en el corto, medio y largo plazo. En este punto, es muy importante que tengas en consideración que no hablamos de facturas, sino de cobros y pagos, es decir, el punto que nos interesa conocer es el flujo que tendrá la caja de nuestra compañía, o lo que es lo mismo, la liquidez de la que iremos disponiendo en cada momento.
Para recopilar toda esta información de una forma organizada y clara, lo recomendable es utilizar algún tipo de programa informático de facturación, pues permitirá clasificarla y organizarla debidamente. Como veremos a continuación, jerarquizar los pagos y cobros será fundamental para no cometer errores.
2. Diferenciar los ingresos corrientes de los extraordinarios
Tras disponer de toda la información necesaria, es vital que la clasifiques y establezcas diferentes tipos de jerarquías para los cobros, en función de si su naturaleza es común o si se trata de un cobro extraordinario que no vayamos a tener normalmente.
Si establecemos esta diferenciación, huiremos de importantes distorsiones en nuestra previsión y evitaremos en mayor medida la posibilidad de que aparezcan graves desajustes que provoquen problemas en nuestra economía empresarial. De lo contrario, si incluimos en el ‘parte’ común algún pago o ingreso que normalmente no suele producirse, estaremos realizando una previsión irreal que, como consecuencia, desembocará en graves disrupciones en la medición del flujo de caja.
3. Escoge la temporalidad que mejor se ajuste a la idiosincrasia de tu compañía
Como te comentábamos antes, la previsión de tesorería tiene flexibilidad temporal, es decir, podemos escoger el periodo temporal que más nos interese, aunque lo más óptimo es escoger el tiempo que mejor se ajuste al carácter de nuestro negocio. Partiendo de una previsión mensual como punto medio general, debes preguntarte si necesitas examinar periodos de tiempo más cortos o si, por el contrario, tu compañía es grande y necesita una visión más a largo plazo. En el primer caso te interesará hacer previsiones de tesorería semanales o quincenales, y en el segundo, semestrales o incluso anuales.
De cualquier modo, nuestra recomendación es que no tires piedras contra tu tejado: haz las cosas fáciles y simplifica tu tarea. Decídete por un margen temporal concreto y actúa en consecuencia, de lo contrario, la gestión será más compleja y las decisiones a tomar serán más dificultosas.
4. Cómo realizar una estimación financiera para la previsión de tesorería
Un instrumento utilizado por muchos autónomos y pequeños empresarios son las plantillas de ‘Excel’, un programa que permite hacer cálculos de forma automática sin que el fallo humano pueda suponer un peligro. Para hacer nuestra estimación financiera deberemos crear una plantilla de previsión de tesorería que pueda servirnos continuamente. Para una correcta estimación económica, esta plantilla deberá contener obligatoriamente los siguientes elementos:
- Ingresos ordinarios.
- Estimación de cobros extraordinarios.
- Gastos recurrentes.
- Estimación de gastos extraordinarios.
- Balance total de la previsión de tesorería.
Como las partidas de gastos e ingresos recurrentes suelen tener un carácter bastante previsible, lo más normal es que no sufran variaciones, no ocurriendo lo mismo con los ingresos y gastos extraordinarios, que, al resultar las partidas más imprevisibles, son las que podrán provocar un mayor daño al balance de la tesorería de nuestra empresa.
Así, como citábamos anteriormente, jerarquizarlas facilitará tu labor y te hará tener una previsión mucho más precisa, obteniendo, en consecuencia, una estimación económica más ajustada a la realidad de tu compañía.
Ya con una cifra de balance total ajustada a la situación de tu empresa, podrás tomar decisiones en consecuencia, en el corto, medio y largo plazo, sin comprometer la caja de la compañía.
Como vemos, hacer un plan de tesorería es básico para el correcto desarrollo y crecimiento de cualquier tipo de compañía, por pequeña o grande que pueda ser, ya que, de lo contrario, podremos llegar a cometer decisiones muy inoportunas que pongan en peligro la continuidad de nuestra empresa.