14 Mar Motivos de una inspección de Hacienda en autónomos
Tiempo de lectura: 4 minutosUno de los grandes temores a los que se enfrenta el responsable de una empresa o un autónomo es a las temidas inspecciones de Hacienda, que ponen el miedo en el cuerpo a prácticamente cualquiera. Pero… ¿debes de tener realmente escalofríos cuando la Agencia Tributaria pasa ‘el escáner’ por tus cuentas? Nuestra respuesta es clara: si has hecho las cosas bien, puedes dormir a pierna suelta.
Antes de nada, has de saber que este tipo de inspecciones se han intensificado de manera notable en los últimos años, especialmente, en la última década, debido a los múltiples intentos de fraude fiscal que se han venido produciendo en España, lo que ha provocado que la Hacienda pública haya decidido tomar un papel activo en el asunto. Esto provoca que una revisión de tu actividad por parte de la Agencia Tributaria pueda ser considerado como normal, pero, ¿qué motivos llevan a Hacienda a repasar tu resumen laboral y fiscal?
Si has comenzado tu actividad profesional por cuenta propia hace poco (descubre aquí: ventajas de ser autónomo), o si gestionas directamente el papeleo de tus labores, es normal que tengas ciertos temores a ‘meter la pata’ y poder incurrir en un error que implique una sanción económica. Es por esto, que a continuación desarrollamos los motivos principales que pueden llevar a Hacienda a revisar tu actividad.
Antes de que sigas leyendo, recuerda que en tugestordigital.es te ayudamos en la gestión si eres autónomo, así no te tendrás que preocupar de nada más que hacer tu trabajo.
Deducción del IVA
Si en la declaración del IVA tu resultado ha salido negativo, es decir, favorable a tus intereses económicos, es normal que la Agencia Tributaria decida realizar una revisión concienzuda de tus labores, antes de devolverte el dinero. Así, es común que te soliciten una revisión de cuotas repercutidas y deducidas del ejercicio declarado; poniendo el ojo en todos los gastos cuyo IVA se haya deducido, con el objetivo de examinar si estas cantidades son correctas.
En este sentido, nuestra recomendación es clara: ten tu contabilidad al día, o pídele a tu gestor que mantenga tus cuentas actualizadas; y, de forma muy especial, el libro del IVA del ejercicio en cuestión, que deberá tener registradas todas las facturas que hayas recibido y emitido. Es importante, en ambos casos, que en este documento se recoja:
- Número de recepción o registro
- Fecha de expedición de la factura
- Fecha de realización de las operaciones
- Razón social de la factura
- Base imponible, tipo impositivo y cuota tributaria
Deducción de cuotas de IVA no deducibles
Una de las infracciones en las que más concurren los autónomos y también muchas sociedades es en la deducción de cuotas soportadas con IVA de cuestionable deducibilidad, tomando en consideración todos los requisitos necesarios que pone encima de la mesa la normativa para poder realizar cada deducción; que nos dice que el IVA soportado sea deducible bajo el cumplimiento de todos y cada uno de los requisitos que están indicados en los artículos del 92 al 114 de la ley del IVA.
Así, las cuotas que normalmente suelen ser más problemáticas son las relacionadas con los siguientes conceptos:
- Facturas por adquisición o gastos de vehículos (ya sean propios o de la sociedad).
- Facturas emitidas por gastos en viajes de trabajo, restaurantes, alojamiento, manutención y todo lo relacionado con este tipo de actividades.
- Facturas de telefonía; sobre todo, en los casos donde tengamos un paquete contratado que incluya servicio de televisión u otro servicio extra no relacionado con las propias llamadas.
Por ello, es tremendamente importante que consultes con tu gestoría las posibilidades individuales que tienes para poder deducir este tipo de conceptos, y los requisitos que has de cumplir para poder hacerlo.
Deducción de gastos
Otro de los grandes puntos conflictivos es la deducción de los gastos; también un punto de constante conflicto en las declaraciones de autónomos y empresas. A lo largo de tu actividad laboral, podrás comprobar que existen una serie de gastos muy concurrentes en cada ejercicio que generan dudas, a la hora de saber si puedes deducirlos, o no. Como veremos a continuación, estos gastos tienen un grado de coincidencia muy elevado con la deducción del IVA; y, entre otros, los más destacados son los siguientes:
- Gasto de vehículos
- Dietas, viajes y manutención
- Teléfono
- Vivienda
- Retribución a administradores
Del mismo modo que en el caso anterior, nuestra recomendación sigue la misma línea: ante la aparición de cualquier género de duda, consulta con tu asesor si puedes deducir estos gastos. Además, es importante que tengas en cuenta que, si tus gastos son mayores a tus ingresos (especialmente en la etapa inicial de tu andadura profesional en solitario) Hacienda quiera ver el detalle completo de los ingresos y tu actividad bancaria en todas y cada una de tus cuentas.
Descuadres entre los modelos trimestrales y el resumen anual
Como viene siendo habitual ya desde hace muchos años en nuestro país, la declaración trimestral es uno de los grandes dolores de cabeza de los autónomos, que encima ha de cuadrar con el resumen anual declarado. Es muy importante que los modelos trimestrales declarados sean coincidentes con el resumen anual, sobre todo, en lo relacionado con el IVA y el IRPF. En caso de que los números no cuadren, lo más probable es que recibamos una notificación de la Agencia Tributaria, para aclarar la diferencia existente o incluso mostrar las facturas o libros contables relacionados con el periodo conflictivo.
Diferencias relevantes entre ingresos declarados y los ingresos en el banco
Con mayor control a cada momento, Hacienda revisa con lupa la actividad bancaria de los autónomos y las empresas, para tener bajo mano la situación financiera declarada de cada persona fiscal, con el objeto de poder comprobar con celeridad si existen importantes descuadres entre los ingresos declarados y los ingresos que realmente recibimos en nuestra cuenta.
En este punto, lo indicado es que tu situación financiera real se aproxime en la máxima medida posible a la situación que has declarado, para que no se produzca una situación incómoda en la que la Agencia Tributaria ponga el foco en tu actividad.
Y, para finalizar, la conclusión es clara: el mejor método para asegurar que tu actividad fiscal (gestoría fiscal) y laboral está en regla, es dejar toda la documentación en manos de profesionales, que aseguren que todo esté bajo control y tú puedas centrarte en seguir haciendo crecer tu negocio.