04 Dic Cómo actuar cuando NO nos pagan una factura
Tiempo de lectura: 4 minutosDe entre las desventajas más importantes que tiene el hecho de ser autónomo (mira aquí: ventajas de ser autónomo), sin duda destaca el peligro y la indefensión ante un impago. Una de las mayores constantes en la vida de un trabajador por cuenta propia es el impago de las facturas por parte de terceros, ya sean particulares, o incluso otras empresas.
Y lo cierto es que al problema de no percibir la cantidad que nos corresponde por un trabajo realizado, le acompañan otros: si nuestra situación económica es ajustada, no cobrar por un trabajo realizado previamente puede provocar que no dispongamos de presupuesto suficiente como para adelantar materiales para trabajos futuros, por lo que nos encontraríamos en una situación de ‘fuera de juego’, al no cobrar por las labores anteriores, y no poder desempeñar las futuras.
Entonces, ¿Cómo podemos hacer frente a este grave problema?. En este post te ofrecemos las respuestas convenientes ante estas situaciones.
Es indudable que se trata de una situación por la que han pasado, sino todos, la gran mayoría de los autónomos: presentas un trabajo, el presupuesto correspondiente, el cliente lo aprueba con total conformidad y, a la hora de enviar la factura, pasan los días y no recibimos el pago. ¿Qué podemos hacer para reclamar?
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Cómo evitar el impago de una factura
En primer lugar, para tratar de evitar al máximo vernos en una situación similar, lo primero es ser previsores: deberemos indicar todo correctamente en las facturas que emitamos, esto es, hacer referencia directa al modo de pago y el periodo del mismo. Por supuesto, también será de vital relevancia indicar el número de cuenta en el que ingresar el dinero, y la fecha de vencimiento de la propia factura. Si no la indicáramos, nos será más complicado reclamar el pago de dicha factura.
Además, nuestra recomendación siempre será que te apoyes en manos expertas (como con tugestordigital.es), y dejes todo lo relacionado con materia fiscal en profesionales, puesto que podremos asesorarte en todo tipo de situaciones, incluso las más delicadas, al tiempo que hacemos crecer y progresar tu negocio.
De cualquier manera, también pueden producirse situaciones de impago cuando hemos hecho todos los trámites en tiempo y forma, emitiendo la factura con todos los datos correctos. En este caso, si el cliente no nos pagara en tiempo y forma, podríamos pasar a realizar la reclamación del pago del trabajo. ¿Cómo debemos actuar en este tipo de situaciones?
Cómo actuar en caso de impago
Llamar al cliente
Si no hemos recibido el pago por nuestro trabajo a tiempo, lo primero que deberemos hacer es ponernos en contacto con el cliente en cuestión, para saber qué ha podido pasar y/o si se ha producido cualquier tipo de contratiempo, sobre todo, si se produjera un error en el número de cuenta a ingresar. Si la problemática desembocara por una falta de liquidez, podrías llegar a un acuerdo en la flexibilidad del pago, o realizar un intercambio de servicios y/productos que compense a ambas partes.
Enviar una carta certificada
Si se diese la situación en la que no logras contactar con tu cliente por vía telefónica, te recomendamos pensar en enviar una carta certificada con acuse de recibo, haciendo referencia directa a la factura que se encuentre en situación de impago.
Al enviar una carta certificada, nos estaremos asegurando de que la petición del pago de la factura ha llegado a las manos del cliente. Asimismo, si el tiempo siguiese pasando y el cliente no hiciese frente a sus responsabilidades económicas, en paralelo, podremos continuar preparando nuestra estrategia para exigir el pago del trabajo, a través de otros medios, como un burofax y/o informando de que se emprenderán las acciones legales que correspondan.
Abogado
Si tras las llamadas telefónicas y el envío de la carta certificada, siguieses sin poder ponerte en contacto con tu cliente, o sin tener noticias suyas, llega el momento de poner ‘toda la carne en el asador’ y contactar con un abogado. Un profesional jurista sabrá orientarte en todo momento para proceder con acierto de acuerdo a la ley, y así poder tenerlo todo siempre atado y bien atado.
La cantidad adeudada tiene su importancia
Otro factor fundamental que deberás tener en consideración es la cantidad que el cliente te adeude. Si esta es inferior a 2000€, puedes beneficiarte de la Justicia gratuita. Esto quiere decir que, en este caso, podría ser el mismo secretario judicial quien valorara el caso, tomando siempre el juez la decisión final. Si la cantidad adeudada fuese superior a 2000€, lo pertinente es contactar con un profesional del Derecho y preguntarle sobre las acciones concretas que puedes llevar a cabo. Entre ellas, el camino que suele recorrerse con mayor asiduidad es el de interponer un proceso monitorio.
En este punto, es muy importante que cumplas todos los requisitos que hemos mencionado anteriormente:
- Conocer el importe concreto de la deuda
- Saber si la factura está vencida
- Saber si la documentación enviada también está vencida (cartas certiciadas, burofax…)
- Y, sobre todo, ser consciente de que este tipo de sanciones prescriben a los 3 años, por lo que, pasado este tiempo, no se aceptarían.
Pasos del proceso monitorio
Para iniciar el proceso monitorio no es necesario requerir a un abogado o procurador, puesto que no se trata de un juicio, sino de un proceso judicial rápido que tiene el objetivo de reclamar las deudas que estén encima de la mesa.
El escrito que adjuntemos en el juzgado deberá estar acompañado de una serie de documentos que acrediten la solicitud:
- Facturas correspondientes
- Correos electrónicos y/o cartas y burofaxes
- Cualquier otro tipo de documento que justifique el impago.
Igualmente, en el formulario que indiquemos también deberán constar los datos de la persona física o jurídica deudora: su domicilio fiscal y el DNI/CIF. La norma es que el tiempo con el que se premia al deudor a realizar el pago del importe adeudado sea de 20 días.
El proceso terminaría con el pago de la deuda, o con un juicio normal, si el cliente no estuviera de acuerdo con la reclamación que se realiza.